SEÑOR PALOMA (PARTE 6)

La verdad era que sí, yo había visto el mapa y yo sabía dónde estaba el portal secreto. Cuando les dijera al General Pancho Villa y al Sr. Paloma todo lo que sabía, ellos estarían asombrados. Ninguno de los dos podría hablar. Después de algunos momentos, Pancho Villa empezó a reír y le dijo al Sr. Paloma: "¡Paloma! ¿Dónde encontraste a este muchacho?". Sr. Paloma estaba ululando en asombro y todavía no podía hablar. Yo respondí al General Villa: "Él me encontró en el Parque Juárez, General Villa". Sr. Paloma ululó antes de hablar pero dijo: "Sí, sí, General Villa, lo encontré en el Parque Juárez". Pancho Villa rió otra vez y dijo en voz alta: "¡Pues vámonos a tu posada, Javier! ¡No tenemos todo el tiempo del mundo!".
Montábamos a caballo, el cual todavía no habló, hacia el centro de Oaxaca. Pero, cuando pasábamos por el estadio de beis bol, Sr. Paloma gritó: "¡Miren ustedes! !Los Guerreros de Oaxaca!". Y era la verdad. Cada pelotero de los Guerreros montaba en motocicleta desde el estadio y pararon cuando estuvieron enfrente de nosotros. Juntos ellos dijeron: "¡Francisco Villa! Nos reunimos otra vez. Nos parece que tú sabes dónde está el portal mágico. ¡Dinos ahora!". Pero el General Villa simplemente rió y entonces dijo en voz baja: "Javier, trae a las Guerrer-ditas, las porristas del equipo a acá. Yo sé que tú las conoces porque he escuchado de la carrera de tontos. Y yo sé que tú la hiciste".
Me puse colorado.
"Y Paloma, trae fuegos pirotécnicos. !Corran ustedes ahora!".
Sr. Paloma voló al centro y yo corrí al estadio. Las porristas no me recordaron pero les dije que todos los peloteros del equipo estaban afuera y, por eso, me siguieron. Cuando regresé con las porristas, Los Guerreros estaban avanzando hacia Pancho Villa y su caballo. Los peloteros amenazaban con sus bates y el caballo relinchó preocupado. Pero el General Villa todavía estaba sonriendo. Cuando me miró, les dijo a Los Guerreros: "¡Miren, Guerreros, las porristas luchan conmigo!". Cada pelotero dio vuelta para mirar a las Guerrer-ditas y cuando ellos hicieron eso, el General Villa gritó: "¡Ahora, Paloma!".
Sr. Paloma, yo no sé cómo, tenía un montón de fuegos pirotécnicos y los disparó a Los Gerreros. Había una explosión fantástica y cuando terminó, todos Los Guerreros desaparecieron.
JAVIER: ¿Los fuegos artificiales pueden matar a un ejército de fantasmas?
PANCHO VILLA: Es la magia de los fuegos.
JAVIER: Sr. Paloma, ¿cómo podías llevar todos los fuegos pirotécnicos?
SR: PALOMA: Es la magia de Paloma.
Entonces, nosotros encontramos el portal mágico (la pared todavía estaba rota) y era tiempo de decir adiós.
JAVIER: General Villa, ¿adónde vas?
PANCHO VILLA: A Chihuahua. Año 1910. Me encanta esa época. Gracias por todo, Javier. Nunca te olvidaré. Y Paloma, nos vemos.
Pancho Villa desapareció por el portal mágico. Sr. Paloma estaba en mi hombro derecho y me preguntó: "¿Y tú, Javier? ¿A dónde vas?"
JAVIER: Pienso que regresaré a Puerto Escondido.
SR PALOMA: ¿Hay bares allá? ¿Sí?
JAVIER: ¡Claro que sí! Hay uno que se llama "La Choza viernes". Te encantará
FIN
Javier Heinz

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